lunes, 26 de diciembre de 2011

Resultado de la encuesta y documental

Aunque nos encontremos en un periodo festivo parece que la actividad de las encuestas no para. Una nueva fue cerrada antes de ayer, en la que se preguntaba a nuestros lectores si el desarrollo sostenible vale la pena en un contexto ecologista.

Para un total de 37 votos así quedaron los resultados:

- Sí, conseguirá que mejore la situación medioambiental: 16 votos.
- Sí, pero no planificado para un futuro lejano: 8 votos.
- No, se siguen consumiendo demasiados recursos naturales: 10 votos.
- No, el error se encuentra en el despilfarro energético: 3 votos.

Fijándose en estos resultados, uno tiene bastante complicado sacar una clara conclusión. A simple vista parece que la encuesta ha sido bastante igualada, pero si uniéramos los "sí" y los "no" (en sus dos opciones) nos encontraríamos en un claro 24 contra 13. Por tanto, podríamos decir que la gente en su mayoría está a favor del desarrollo sostenible.


Somos Parte recomienda ver este documental. Dura una hora y cuarto, pero vale la pena debido a su carácter didáctico y sincero, sin pelos en la lengua.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Solar y eólica alemanas

El objetivo fijado en Alemania para el 2010 era llegar a un 12'5% de energías renovables en su producción eléctrica nacional, pero ya lo cumplieron a mediados del pasado año 2007. El éxito de los programas para la promoción de este modo de energía se debe en gran parte a la iniciativa autónoma de las ciudades y de las regiones, reemplazada más tarde por una ley federal.

El puñado de países que han apostado por las energías renovables sin haberse preocupado por el desarrollo de las negociaciones mundiales han avanzado más que todas las iniciativas adoptadas a escala internacional. La autonomía decisoria de la que disponen las ciudades que han lanzado las primeras iniciativas explica asimismo este éxito: las municipalidades dependen menos del "complejo político-energético" que los Gobiernos.


A pesar de que no siempre se ha alcanzado el éxito económico, los proyectos comunales no han dejado de mejorar la calidad de vida y la atmósfera social en los municipios, además de haber creado un gran número de puestos de trabajo. Los jefes de empresa precursores en la producción de técnicas de energías renovables son generalmente principiantes. En efecto, las relaciones comerciales entre los grupos tradicionales de tecnología energética y sus clientes habituales casi no permiten, obviamente, actuar independientemente o con originalidad.

El conjunto de este éxito explica que más de cuarenta países en todo el mundo ya hayan copiado esta ley.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Un teatro con malos actores

Desde el 5 de junio del año 1972 se han llevado a cabo un total de cuatro Cumbres de la Tierra:

- Cumbre de Estocolmo (05/06/1972): la primera. Según dicen, fue la que marcó un punto de inflexión en el desarrollo de la política internacional del Medio Ambiente. A la misma acudieron un total de 113 países, 19 organismos intergubernamentales, y más de 400 organizaciones intergubernamentales y no gubernamentales. Algunos sostienen que tuvo un impacto real en las posteriores políticas medioambientales de la Unión Europea. Pero claro, parece que se olvidaron un poco del resto.


- Cumbre de Río de Janeiro: (veinte años más tarde, 03/06/1992): 125 Jefes de Estado, 178 países, 400 representantes de organizaciones no gubernamentales (y más de 17000 personas a través de un foro) acordaron que la principal solución sería llevar a cabo un desarrollo sostenible. Un desarrollo sostenible que, aún hoy (otros veinte años más tarde, cuarenta años después de la primera Cumbre de la Tierra) se sigue estudiando cómo aplicar. Hay una encuesta abierta sobre este tema ahora mismo en Somos Parte.

Como vamos narrando los hechos cronológicamente, haremos un parón para hablar del Protocolo de Kioto (11/12/1997): la principal meta de dicho acuerdo era intentar disminuir (que no frenar) el cambio climático, y reducir los gases de efecto invernadero marcándose un año (2012) para comprobar si los objetivos habían sido cumplidos, teniendo como resultado algunos Estados que suspenden (como España, por ejemplo) en reducir una cantidad ínfima de emisiones. EEUU, con George Bush como su Presidente en el pasado año 2002, se retiró del Protocolo de Kioto sin ratificarlo.


- Cumbre de Johannesburgo (26/08/2002): más de un centenar de Jefes de estado y más de 60000 personas acordaron que querían proteger el Medio Ambiente, pero que también ello fuera compatible con un crecimiento económico continuo (qué raro). A través de 615 puntos, entre los que se trataba una pobreza contra la que aún perdemos por goleada, se revisaron Cumbres anteriores (habla que habla sobre el desarrollo sostenible). Total, la Cumbre de Johannesburgo costó 80 millones de euros, y esto podría representar lo siguiente: el 67% del gasto sanitario de Malí o la conexión de agua potable de 80000 personas en una ciudad como La Paz (Bolivia) o Manila (Filipinas), entre otras. La pregunta entonces es: ¿valió la pena la reunión en Johannesburgo?

- Cumbre de Durban (actualmente): se crea ante la finalización inminente del Protocolo de Kioto el próximo año 2012, buscando su renovación. Está siendo un auténtico fracaso, pues países de primer nivel como EEUU y China (potencia emergente) se niegan a disminuir sus emisiones de CO2 a la atmósfera. Queda prorrogado ante este fallido acuerdo, y todos esperamos impacientes, manifestándonos ante sus puertas, sin que nos hagan caso.


Esperamos impacientes, mientras vemos la que está cayendo ahí fuera. Esperamos impacientes, mientras vemos que son simples excusas para dar una buena imagen. Únicamente se preocupan por el desarrollo económicamente sostenible. Esperamos impacientes a que termine la función.